Padel: ¿Entiendes tu deporte?
Este deporte que tanto engancha y cuyo número de practicantes aumenta cada día, es una de las actividades físico deportivas más completas, pero como tal esto tiene aspectos positivos y negativos.
¿Qué quiero decir con esto?
Que la practica continuada del padel conlleva numerosos beneficios para nuestro organismo, pero que también, su práctica de manera descontrolada y sin preparación complementaria puede suponer un riesgo para nuestra salud, debido a que aumenta el riesgo de lesiones.
Los numerosos cambios de direcciones que se producen durante un partido conllevan realizar un gran número de aceleraciones y desaceleraciones junto con una cantidad muy elevada de golpeos, el conjunto de todas estas acciones físicas y técnicas, convierten al juego del padel en un deporte de riesgo para jugadores sin preparación.
Recibir clases de padel para mejorar nuestros gestos técnicos y realizar una preparación física adecuada, no sólo nos va a ayudar a ser mejores jugadores sino también a disminuir el riesgo de lesiones. Que posiblemente sea el aspecto más interesante en el padel amateur.
Muchos deportistas cuando incluyen el trabajo de preparación física se dan cuenta que además de estar más rápidos, fuertes y ágiles, tienen, sobre todo, menos dolores en su día a día y se lesionan menos. Con esto no estoy diciendo que nos volvamos locos con el gimnasio, el padel es un deporte donde interactúan la mayoría de nuestras capacidades físicas y debemos realizar una preparación acorde a las características que tiene el padel.
La fuerza, la resistencia, la velocidad, la coordinación y la flexibilidad son necesarias para este deporte. Pensemos cómo es el pádel…
Un partido de padel suele durar entorno a una hora y media, pudiendo alargarse hasta pasadas las tres horas. Durante este tiempo se mezclan acciones (puntos) de unos 20-25 segundos de media con pausas de otros 20 segundos (tiempo entre puntos) que son alternados con descansos algo mayores, de 90 segundos (cambios de lado).
Si traducimos los tiempos de juego a las características físicas que necesitamos para resistirlo, necesitaríamos por un lado una base aeróbica para aguantar un partido entero, pero también necesitamos ser rápidos y potentes para que todas esas acciones que se dan en un partido hacerlas lo más rápidas posibles y con la mayor calidad y eficacia.
En el siguiente post iremos desglosando como podríamos entrenar cada una de las capacidades que necesita el jugador de padel y os propondremos alguna sesión tipo para que podáis realizar.
Recuerda… no es entrenar más, sino entrenar mejor!
Ana Fernandez de Osso, Jugadora del WPT